Ara Malikian: "Mi adolescencia fue dura, pero más fácil que la de nuestros niños"
Durante una visita inusual a su hogar en Madrid, el destacado violinista Ara Malikian, conocido por su singular estilo musical y su trayectoria inspiradora, reflexionó sobre su difícil infancia y la actualidad que enfrentan los niños de hoy. En una entrevista realizada en su casa, Malikian compartió sus impresiones sobre su vida y su reciente trabajo, el espectáculo titulado *Intruso*, que lanza en el marco de una gira mundial.
A sus 56 años, Malikian narra cómo su niñez estuvo marcada por la violencia y las privaciones de la guerra civil en Líbano. A la edad de 14 años, su talento lo llevó a Alemania mediante una beca para estudiar violín, donde pasó cinco años de separación de sus padres. Este periodo formativo le permitió adquirir un dominio excepcional del instrumento, un proceso que lo llevó desde los pasillos del Teatro Real de Madrid, donde inició su carrera como músico de orquesta, hasta convertirse en un reconocido solista y estrella de los escenarios.
Malikian, quien ha logrado fusionar diversos géneros musicales en su interpretación, ahora presenta *Intruso*, un proyecto en colaboración con el actor Jaime Lorente. El músico destaca la importancia de conectar emocionalmente con el público a través de la música, especialmente en un mundo que parece, según sus propias palabras, "sin alma".
A lo largo de la conversación, el violinista no pudo evitar comparar su adolescencia con la de la juventud actual, afirmando que, a pesar de sus dificultades, cree que las nuevas generaciones enfrentan retos aún más complejos. "Mi adolescencia fue dura, pero más fácil que la de nuestros niños", expresó.
Malikian es un ejemplo de resiliencia y talento, y su historia continúa inspirando a muchos tanto dentro como fuera de los escenarios. Su conmovedora trayectoria y su nueva producción prometen dejar una huella significativa en el panorama musical contemporáneo. Con su gira mundial a las puertas, los amantes de la música esperan ansiosos la oportunidad de disfrutar de su arte y de la pasión que lo caracteriza.
En un mundo donde las interacciones humanas parecen desbordarse por las pantallas, la propuesta de Malikian vuelve a recordar el poder de la música como un vehículo de conexión genuina. "Provoca sentimientos, y en estos tiempos eso es importante", concluyó el violinista, invitando a todos a apreciar lo que realmente importa.